Carmen Bachiller/ @placeresymas
Cuando nos propusieron realizar uno de los recorridos de http://www.rutasdetoledo.es/ no nos lo pensamos. Toledo es una de esas ciudades en las que, por más que intentes conocer cada uno de los rincones de su Casco Histórico, siempre hay algo que termina sorprendiéndote.
Fue el caso para dos de las personas que escribimos este blog. Emma Jaraba y yo misma nos adentramos una noche en un “Toledo Mágico” que os recomendamos visitar durante la Semana Santa que está a la vuelta de la esquina.
En la ruta que se inicia en la Puerta Llana de la catedral contaréis con un guía, digamos, diferente. Quizá sea uno de sus atractivos. Luis Rodríguez Bausá es profesor universitario, investigador, escritor –encontrarán referencias suyas sobre las leyendas toledanas- y, además, colaborador de Iker Jiménez en ‘Cuarto Milenio’. Imaginaréis que algún fantasma encontraremos a lo largo de una ruta de la que os damos algunas pinceladas pero que no desvelamos para que la podáis disfrutar plenamente.
El recorrido comienza cuando ya ha oscurecido por callejuelas nada habituales de Toledo, bajo cobertizos, escaleras imposibles, rincones ocultos… y transcurre a través de lugares con nombres tan sugerentes como el Callejón de los Muertos, el Cobertizo de Pozo Amargo, el Callejón de la Cárcel del Vicario o el Callejón del Diablo.
La ciudad está llena de leyendas y algunas verdades que Luis irá desvelando a lo largo de la ruta. Os hablará de los dos millones de documentos que guarda el Archivo de la catedral, algunos de ellos tan insólitos como la relación de las 892 reliquias que se conservan en el templo. O de cómo Isabel La Católica dejó pagadas 378.000 misas para celebrar por su alma tras su muerte…Todavía hoy están vigentes.
Os llevará hasta lo que fue un núcleo de hechiceras que habitaron el Toledo de la segunda mitad del siglo XVII y os contará cómo eludieron los procesos de la Inquisición.
Pasaréis por la plaza de Santa Isabel, donde se encuentra la sede de la actual Escuela de Traductores de Toledo que, como ya os hemos contado, en realidad nunca existió. Fue un término que comenzó a utilizarse a partir del siglo XIX. Y es que la ciudad albergó miles de volúmenes durante la época de Alfonso X El Sabio que atrajo a viajeros de todo tipo. Científicos y sabios de la época que buscaban un saber perdido en aquellos libros.
La Scientia Toledana
Toledo fue sede de la Nigromancia, de la llamada “Ciencia Toledana”. Aquí venían a “aprender sobre los demonios”, es decir, todo aquello alejado, en el siglo XIII, de cualquier ortodoxia cristiana. Se tradujeron la Cábala, la Torá, el Corán…De ahí a que hubiese una escuela…
De aquellos tiempos derivan tantas y tantas leyendas toledanas tan bellas como increíbles en muchos casos. Conoceréis algunas –hasta nos contarán que a Toledo se le atribuye la ubicación de una de las puertas del infierno– y sabréis de la existencia de enigmáticas momias en algunos de los cientos de conventos e iglesias que poblaron Toledo.
Terminaréis visitando una enorme cueva circular en el subsuelo toledano, a los pies del Alcázar, donde se aprecia la roca madre sobre la que se sustenta la ciudad. Allí los Templarios, el Santo Grial o la Mesa de Salomón serán protagonistas de las historias que os cuente vuestro guía.
Son unas dos horas de ruta, que os costarán 12 euros por persona aunque sabemos que la empresa tiene ofertas puntuales para algunos días de la semana o para grupos. Si os decidís a recorrer esta parte de la ciudad, contadnos la experiencia. Y en la cueva…mucho cuidado.
Pues, yo he estado en esa excursión nocturna y me parece una clavada. No merece la pena y el tal Luis Rodriguez, será mucho profesor universitario pero me parece un fricky o un pintamonas. No corresponde con su edad y formación algunas cosas de las que habla y hace, pero bueno, de todo tiene que haber en la viña